El Banco Mundial estima que la economía de la Argentina crecerá este año al ritmo de la de Brasil. El organismo internacional estimó hoy que la Argentina crecerá este año «alrededor de 7,5%», al igual que Brasil y Perú, al difundir el informe elaborado por el economista jefe del organismo para la región, Augusto de la Torre.
El estudio, que se dio a conocer en el marco de la asamblea anual del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional que abrirá este viernes, anticipa que la expansión de Uruguay y Paraguay será de 6,1% (por encima del promedio regional).
En tanto, Chile, Colombia, República Dominicana, México y Panamá mostrarán este año «un crecimiento robusto», en un rango de 4 a 5%.
De la Torre dijo que la fase de recesión del ciclo económico en América Latina y el Caribe fue de entre nueve y once meses, es decir, «una duración promedio más corta que la de las economías de ingreso alto».
«La región ha emergido sólida de la crisis y para 2010 su Producto Interno Bruto (PIB) estará por encima de los niveles de 2008; en tanto que el de otras regiones como Europa y Asia Central será 1,7% menor que antes de la crisis», precisó el informe.
Agregó que «en la etapa de recuperación, América Latina y el Caribe ha mostrado signos de resistencia que han permitido a algunos países restablecer el crecimiento a tasas comparables a los tigres asiáticos».
En contraposición al pasado, añadió De la Torre, la crisis global también encontró a los países latinoamericanos y caribeños «con el espacio y la credibilidad necesaria para ejecutar políticas monetarias y fiscales contra cíclicas, lo que les permitió mitigar parcialmente el shock global».
Mencionó en ese sentido la capacidad de reducir las tasas de interés nominales (especialmente en Brasil, Chile, Colombia, México y Perú), como de «incrementar el gasto público en términos reales, el cual se destinó en gran parte a programas sociales y de infraestructura».
De acuerdo con el estudio, los factores que usualmente solían amplificar los choques externos (monedas débiles, procesos fiscales insostenibles, sistemas bancarios frágiles, etc.) «fueron revertidos y ayudaron a mitigar el impacto».
«Por primera vez en décadas, varios países de la región fueron capaces de implementar políticas contracíclicas fuertes, particularmente en política monetaria», remarcó el Banco Mundial.
De ese modo, «los países de América Latina y el Caribe evitaron crisis financieras en casa y están saliendo de la crisis con posiciones fiscales y de deuda favorables».
De la Torre explicó que en este nuevo milenio la región se movió «hacia una forma más segura de integración financiera internacional», y «se volvió acreedor neto del resto del mundo en contratos de deuda».
A la vez, América Latina «aumentó de manera significativa su posición de deudor neto de contratos de valores de renta variable, particularmente a través del flujo de capital extranjero, que con niveles de 12%, ya supera los de 2007, un récord histórico».-