El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, anunció que no se presentará en las elecciones para continuar en el cargo tras la finalización de su mandato en 2013, aunque dijo que su intención es reformar el sistema judicial y modificar la Constitución antes de dejar el poder.
Berlusconi dio esta información durante una cena con periodistas extranjeros en Roma. El primer ministro ya había adelantado en el último diciembre que probablemente no intentaría seguir en el poder después de 2013, según informó la agencia de noticias Europa Press.
El mandatario italiano también aseguró que no pretende presentarse a la Presidencia y propuso como posible sucesor al secretario del Consejo de Ministros, Gianni Letta.
También sugirió que el ministro de Justicia, Ángelo Alfano, podría ser el futuro líder de su partido, el Pueblo de la Libertad, aunque no descartó la posibilidad de que él mismo se convierta en una figura con autoridad en el partido para asesorar a futuras coaliciones de centro-derecha.
Berlusconi, de 74 años, llegó a ser primer ministro por primera vez en 1994, y posee una fortuna de casi 6.220 millones de euros y entre sus empresas figuran las tres cadenas de televisión privadas más importantes de Italia.
«Il Cavaliere» sobrevivió a numerosos escándalos y procesos judiciales.
La Cámara de Diputados aprobó ayer un proyecto de ley que acortará la duración de los juicios contra personas que no fueron condenadas anteriormente, pudiendo de esta manera poner fin a un juicio en el que Berlusconi está acusado de sobornar al abogado británico David Mills para que mintiera ante un tribunal.
Según la oposición, este proyecto de ley, que ahora deberá debatirse y votarse en el Senado -donde el Gobierno tiene una sólida mayoría-, es una «desgracia» y está hecho a medida para Berlusconi.
El primer ministro dice ser víctima de una campaña en su contra organizada por jueces de izquierda, una acusación que repitió durante la cena de ayer en Roma.
