El rey Juan Carlos lamentó haberse «equivocado» tras ser dado de alta de la fractura de cadera que se produjo en un viaje a Botsuana para una cacería, que fue el centro de una gran polémica por tener lugar cuando España sufre una crisis económica. «Lo siento mucho, me he equivocado y no volverá a ocurrir», dijo un compungido Don Juan Carlos al abandonar el hospital madrileño en el que fue intervenido de la cadera en la madrugada del pasado sábado.
Después de «un posoperatorio muy satisfactorio», el rey «ha conseguido prácticamente plena autonomía para los movimientos cotidianos, por lo que hemos decidido darle el alta hospitalaria este mediodía», según el parte médico firmado por el doctor Villamor, que dirigió la intervención quirúrgica, y el jefe del Servicio Médico de la Casa del Rey, Avelino Barros.
El rey se fracturó la cadera el viernes, como consecuencia de una caída accidental al tropezar con un escalón en la residencia donde se alojaba en Botsuana, país en el que se encontraba desde el pasado día 9 para practicar la caza mayor.
La estancia privada del monarca en ese país africano para cazar elefantes causó una amplia polémica en España, golpeada por una debacle económica que provocó que el índice de desocupación superara el 23 por ciento de la población activa.
