El líder supremo de Irán dijo el miércoles que la República Islámica no dialogará con Estados Unidos acerca de su programa nuclear a menos que se abandonen las sanciones y las amenazas militares. «Lo que dicen, nuestro presidente y otros, que negociaremos; sí, lo haremos, pero no con Estados Unidos, porque Estados Unidos no está negociando honestamente como un negociador normal», dijo el ayatolá Ali Khamenei en un discurso televisado a funcionarios de alto rango.
«Dejen de lado las amenazas y dejen de lado las sanciones», agregó.
El presidente Mahmoud Ahmadinejad ha dicho que Irán está dispuesto a reanudar las negociaciones con seis potencias mundiales en las próximas semanas.
No estaba completamente claro en primer término si Khamenei descartaba la reanudación de las negociaciones con los seis o si no habrá conversaciones bilaterales con Washington, algo poco probable, debido a que ambos países no tienen relaciones diplomáticas.
Las potencias quieren que las negociaciones se centren en cómo controlar el polémico programa iraní de enriquecimiento de uranio, algo que Teherán considera fuera de toda negociación. La república islámica sostiene que su programa es para generar electricidad, mientras que los países occidentales sospechan que pretende fabricar bombas atómicas.
Anteriormente se han realizado negociaciones con los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU -Estados Unidos, Rusia, China, Francia y el Reino Unido- más Alemania. Ahmadinejad dijo que quería que se incluyera a otros países en esta oportunidad.
Pero Khamenei, quien toma las decisiones definitivas en Irán, rechazó las negociaciones con Estados Unidos que, además de presionar con éxito por una cuarta ronda de sanciones de la ONU contra Irán, se reserva el derecho de una acción militar si las medidas de presión y la diplomacia no controlan la actividad nuclear iraní.
«Si las súper potencias quieren amenazar, presionar, imponer sanciones y mostrar un puño de hierro, mientras por otro lado buscan sentarse en la mesa de negociaciones, eso no es una negociación y nosotros no tendremos ese tipo de negociaciones con nadie», afirmó.
Khamenei agregó que Irán no descarta hablar con Estados Unidos en una situación diferente. «Si estas condiciones son implementadas, como anuncié hace algunos años, nosotros no hemos jurado no volver a negociar».
Washington no ha descartado un ataque militar para evitar que Irán obtenga una bomba nuclear, pero ha dicho que sigue comprometido con una «aproximación dual», mediante sanciones y diplomacia con la oferta de incentivos para que Teherán suspenda sus labores nucleares más delicadas.
Teherán debe comenzar a instalar el sábado barras de combustible en su primera planta de energía nuclear, un complejo construido por Rusia y que no está relacionado con la actividad de enriquecimiento de uranio.
Khamenei también advirtió a Washington sobre un ataque contra Irán.
«Es poco probable que ellos (Estados Unidos) realicen una medida tan estúpida, pero todos deberían saber que en el caso de un ataque de ese tipo, la respuesta de la nación iraní no será limitada a la región de Oriente Medio y tendrá un alcance mayor», afirmó.
Funcionarios iraníes suelen decir que podrían cerrar el Estrecho de Ormuz en el caso de una acción militar -cerrando una ruta de transporte por la que pasa un 40 por ciento del crudo que viaja por mar.
Analistas dicen que la República Islámica también podría atacar a las fuerzas de Estados Unidos en la región y que los grupos de milicianos como Hamas y Hezbollah podrían adoptar medidas en apoyo a Irán.
