Vuelos low cost Iguazú-Madrid con final anunciado: abril 2020

La experiencia del viaje soñado para unir Madrid con Iguazú (en algún caso con escala en Asunción, Paraguay) durará poco. Muy poco. Apenas 9 meses. Pero tan solo 5 de esos meses bastaron para que los ejecutivos de Air Europa consideraran la inviabilidad de las operaciones -que terminarán en abril-, pues sus últimos vuelos apenas ocupaban menos de un tercio del avión. Los 70 viajeros low cost por tramo no cubren ni por asomo los costos operativos, analizan los ejecutivos de IAG (holding de British Airways – Iberia), adquirente de Air Europa.

De esta manera que los viejos operadores de Aerolíneas Argentinas (y que tan malos recuerdos traen a la línea aérea de bandera) otra vez vuelven a tener una actitud reprochable por su actividad en los cielos de la patria. Misiones, aseguran, accionará para que se cumpla un contrato (no divulgado), que garantizaba un año de prueba. Hasta abril se puede hacer IGR-MAD (ida y vuelta) a $ 52.795 (sin impuestos).

Cuando el 2 de agosto el presidente Mauricio Macri encabezó el acto inaugural, recibió cataratas de elogios del gobernador Hugo Passalacqua porque la «revolución de los aviones» llegaba a Misiones para dar nuevo impulso a la industria turística provincial, aún en pañales.

Para esa fecha, el macrista diario Clarín «informaba» sin reparos que «La nueva ruta internacional, cuyo vuelo inaugural fue el pasado viernes 2 de agosto y tuvo 100% de ocupación, tiene por el momento dos frecuencias semanales, y una alta demanda: la compañía informó que los primeros diez vuelos superaron el 80% de ocupación, y las reservas para los siguientes seis ya superaron el 60%.

Si tenemos en cuenta las frecuencias, para los dos primeros meses, la compañía tenía alto impacto en la demanda, cosa que también se verificaba (ya en agosto) hasta diciembre, por lo que la decisión empresaria es bastante difícil de entender, sobre todo porque en la materia es fundamental el sostenimiento del servicio en el tiempo para verificar su rendimiento, si es que el estudio de mercado y el plan de negocios fue correctamente trazado.

A esta altura da la impresión que la «revolución de los aviones» se sostenía con alta tasa de subsidios y desregulaciones que implican reducir costos operativos, todo impulsado por un gobierno, el de Mauricio Macri, cuya entelequia fue insostenible en 2019, reflejado en la derrota electoral de octubre.
Lo penoso es que la experiencia transcontinental durará mucho menos que las tratativas que llevaron a colocar el primer avión de 319 pasajeros en Iguazú. Fueron dos años de negociaciones bilaterales para el vuelo que une la capital de España con la ciudad de las Cataratas con una tarifa inferior que viajar desde Madrid a Córdoba o Buenos Aires: 714 dólares sin equipaje y 811 con maletas en bodega. Hoy (y hasta el cierre de sus prestaciones), la compañía ofrece el servicio de ida y vuelta (no incluye equipaje en bodega) a $ 52.793/$ 52.795. Lógicamente, habrá que incorporar los costos extra de la nueva legislación que se aprueba viernes para los usuarios argentinos.

Mucho ruido y pocas nueces
El 2 de febrero de 2018, Nuria Rebón exponía en El Cronista de Buenos Aires que «Air Europa aterriza en Iguazú con vuelos desde Madrid y dos nuevos hoteles – La española Globalia, que controla a la aérea, agencias y hoteles, busca vender paquetes a europeos. Invertirían u$s 50 millones; incluye casino y barco-hotel flotante».

Es altamente recomendable leer ese artículo para comprobar la extraña decisión de los compradores de Globalia, empresa que asociada con otras, tenían en mente un mercado extraordinariamente rico para el usuario europeo.

Desde el Gobierno provincial, aseguran que el contrato garantizaba la operación por un año y que, hasta el momento, la ocupación fue baja debido a que se esperaba que esta aumentara recién a partir de marzo.

De su lado, la empresa buscaría sellar acuerdos de código compartido con otra aerolínea de la región para continuar ofreciendo la conexión entre Europa y Puerto Iguazú.

Según apunta Reportur, la decisión de dar de baja ruta IGR-ASU-MAD tiene que ver con una nueva estrategia que planea la firma tras ser adquirida por el consorcio aeronáutico IAG, dueño de Iberia, Vueling y British Airways.

En noviembre pasado, el gigante aéreo Airlines Group (IAG), propietario de British Airways e Iberia, anunció la adquisición de Air Europa a cambio de 1.000 millones de euros con la intención de posicionar al aeropuerto de Madrid como su principal hub. La operación se cerraría en la segunda mitad de 2020 y, señalan, impulsaría en un 50% el tamaño de Iberia y un 10% el de IAG en términos de tráfico de pasajeros.

IAG anunció en un comunicado un acuerdo con el grupo de turismo español Globalia, propietario de Air Europa, cuya compra «permitirá a IAG aumentar considerablemente las conexiones con América Latina y el Caribe»​.

Para el caso de Misiones, uno de los destinos más demandados de América del Sur, la fusión no es para nada alentadora.