Desde las 6:58 pm, hora en la que se registró el terremoto que sacudió Ecuador, se han registrado 189 réplicas; cifra inferior al número de muertos que reportan las autoridades: 235. Es el terremoto más fuerte en ese país en los últimos 36 años.
Este evento sísmico, según los reportes oficiales, fue seis veces más potente que el que se presentó en Japón la semana pasada. Ese fue de 7,3 grados y cobró la vida de más de 41 personas. El de Ecuador deja hasta ahora 1.557 heridos.
Según los expertos, la inestabilidad de las construcciones en las que se presentó el sismo, ha hecho que el número de muertos y heridos ascienda dramáticamente.
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Guayaquil, a oscuras.
El pueblo de Ecuador que quedó hecho trizas
Una de las poblaciones más afectadas es Padernales, en el norte de la provincia de Manabí. Allí, según reseñan los medios locales, hay 150 desaparecidos.
El alcalde de Pedernales, Gabriel Alcívar, contó que se ha divido a la ciudad en cinco zonas para distribuir el trabajo de rescate y búsqueda de los organismos de socorro, como los Cuerpos de Bomberos de Quito, Santo Domingo, Pedernales y Esmeraldas, que laboran actualmente en la zona junto con Cruz Roja, Policía Nacional y Militares.
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Manta, Ecuador: imagen desgarradora de un hotel destruido.
La situación en esta población se vuelve más crítica con el paso de las horas si se tiene en cuenta que en el lugar no hay agua potable, energía eléctrica ni Internet.
Según Alcívar, el 60% de esa población está devastada y en ruinas. El diario Universo, por su parte, señala que “representantes de la Cámara de Turismo de Pedernales aseguran que el 90% de la infraestructura hotelera está destrozada, y los pocos hoteles que quedan en pie presentan severos daños”.
“La gente deambula, llora desesperada y de dolor, pidea ayuda. Son los sobrevivientes del cantón Pedernales, en la provincia de Manabí, que buscan a sus familias, debajo de los escombros de bloque, hierre, madera y zinc que están por los suelos”, así describe la situación El Comercio.
“Es desalentador. Solo hay destrozos de tanta casa y edificio caídos; casi nada queda en pie. Por ejemplo, el hotel Royal, de cinco pisos, estaba lleno con turistas. No se sabe cuántas personas, pero los que sobrevivieron hablan de 30 a 50 personas. No se sabe nada de ellos”, agrega.
