El presidente de Cuba afirmó que «falta un largo y complejo camino para actualizar el modelo económico y social» del país y mencionó entre los obstáculos a las «indisciplinas sociales».
«Las indisciplinas sociales se han arraigado en la sociedad y ocasionado daños morales y materiales», dijo el presdiente de Cuba, Raúl Castro, durante el discurso con que clausuró el primer período ordinario de sesiones del parlamento.
«Hemos visto a lo largo de más de 20 años el acrecentado deterioro de valores morales y cívicos como la honestidad, la decencia, la vergüenza, el decoro, la honradez y la sensibilidad ante los problemas de los demás», sostuvo el mandatario.
Castro explicó que se identificaron «191 manifestaciones de este tipo, separadas en indisciplina social, ilegalidades, contravenciones y delitos recogidos en el Código Penal», informaron las agencias de noticias ANSA y Prensa Latina.
«Una parte de la sociedad ha pasado a ver normal el robo al Estado», denunció el presidente entre los factores que obstaculizan una materialización más rápida de las reformas económicas anunciadas por el gobierno en los últimos años.
Otras son la propagación de construcciones ilegales, la comercialización ilícita de bienes y servicios, el hurto y el sacrificio ilegal de ganado, el acaparamiento de productos deficitarios y su reventa a precios superiores, explicó.
Consideró, no obstante, que esa «pérdida de valores éticos y el irrespeto a las buenas costumbres puede revertirse mediante la acción concertada de todos los actores sociales sin exclusión», aunque aseguró, será «un proceso complejo que tomará bastante tiempo».