Obama promulgó la Ley de Reforma Financiera

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, sancionó con su firma la reforma financiera más ambiciosa de los últimos 80 años en el país, con la que el gobierno espera poner fin a las maniobras más arriesgadas de Wall Street. El mandatario norteamericano estampó su rúbrica en la ley aprobada hace menos de una semana en el Senado tras una larga batalla política, en lo que se considera su mayor éxito en política interna desde que lograra -también- la reforma sanitaria meses atrás, según un despacho de la agencia DPA.

obama-rusia81

«Estas reformas representan las protecciones financieras para los consumidores más fuertes de la historia», sostuvo Obama durante la ceremonia, en la que también estuvo presente su vicepresidente, Joe Biden.

La reforma pretende aplicar las lecciones aprendidas de la crisis financiera de 2008 que, según el presidente, «nació del fallo de responsabilidad desde ciertas partes de Wall Street hasta los pasillos del poder en Washington».

Según afirmó Obama, las nuevas «protecciones» serán aplicadas por un nuevo organismo de control para los consumidores que no tendrá más que una tarea: «Proteger a la gente, no a los grandes bancos, no a las entidades crediticias, no a las casas inversoras, en el sistema financiero».

«Esto no es sólo bueno para los consumidores, es bueno para la economía», subrayó respecto a la ley, que en sus más de 2.000 páginas endurece las normas y el control para las entidades financieras y refuerza el derecho del consumidor.

Las nuevas reformas apuntan a impedir que las compañías financieras se involucren en las prácticas arriesgadas que llevaron a Wall Street cerca del colapso en 2008 y marcaron el comienzo de la recesión global.

La ley prevé la creación de un consejo regular compuesto por diez miembros que dependerá del Departamento del Tesoro y que debe advertir de los posibles riesgos del sistema financiero.

El gobierno recibirá, además, nuevos poderes para hacerse con el control de instituciones financieras que estén en situación de quiebra.

Las autoridades reguladoras tendrán más facultades para escindir en divisiones más pequeñas las grandes instituciones financieras que pongan en peligro el sistema financiero.

También se regulará el uso que los bancos hacen de los instrumentos financieros más complejos.

Las entidades que cuenten con reservas de garantía estatal podrán invertir sólo en un abanico muy limitado de fondos de alto riesgo (como hedge funds o fondos de private equity).

«Gracias a esta ley los estadounidenses nunca más tendrán que asumir las consecuencias de los fallos de Wall Street (…) No habrá más rescates (de instituciones financieras) pagados por los contribuyentes», dijo hoy el mandatario demócrata, que llamó a las autoridades reguladoras a mantenerse «vigilantes» a la hora de aplicar la reforma.

Obama apuntó que el trabajo aún no ha terminado y que serán necesarios ajustes.

Las autoridades reguladoras aún deben trabajar sobre los pormenores de muchas áreas de la reforma, algo que llevará años.

La oposición republicana criticó duramente la ley, alegando que supondrá la destrucción de puestos de trabajo. «Las empresas perderán oportunidades de crecer», dijo el senador republicano Richard Shelby.