El Gobierno anarco capitalista del presidente Javier Milei publicó en el Boletín Oficial la nueva fórmula de movilidad jubilatoria, que contempla aumentos mensuales de acuerdo al avance del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Los jubilados perderían más poder adquisitivo ya que el decreto establece que la primera actualización se hará efectiva a partir de las prestaciones correspondientes al mes de julio.
Eso sostiene el artículo 2° del decreto 274/2024, publicado en las últimas horas en el Boletín Oficial. Es decir, hasta junio próximo «resultará aplicable la fórmula vigente a la fecha del dictado presente», de acuerdo al artículo 3° del texto.
Tal como habían adelantado desde el Gobierno, la nueva normativa planteaba la inclusión de un porcentaje extra a modo de paliativo frente a la pérdida de poder adquisitivo de los últimos meses. Frente a una inflación que en los últimos tres meses llegó a 59,3%, el Gobierno dispuso el pago de un 12,5% en abril, sobre los haberes correspondientes a marzo. Febrero, que fue el mes con menor inflación, el índice llegó al 13,2%, casi un punto más que el porcentaje dispuesto.
En abril, mayo y junio también habrá incrementos con base en la ley de jubilaciones, pero serán a cuenta de la movilidad a pagar en junio del 2024 conforme el índice que se obtendrá de acuerdo a la fórmula vigente. «Una vez obtenido el porcentaje que surja de esta, se descontarán los puntos porcentuales de los incrementos acumulados que la persona beneficiaria hubiera percibido», según el decreto. Ese es uno de los puntos llamativos de la nueva medida.
«En caso de que estos superen el aumento calculado según la fórmula mencionada en el primer párrafo de este artículo, no se descontará la diferencia, la que se considerará incorporada al haber. Si fueran menores a dicho aumento, se abonará la diferencia resultante», según el artículo 5° del decreto.
Tras la publicación del decreto, hay quienes advirtieron que la pérdida de poder adquisitivo de los jubilados lejos de recuperarse, pareciera aumentar su sangría.
Para Alejandro «Topo» Rodríguez, director del Instituto Consenso Federal y ex diputado nacional, «el nuevo sistema es una nueva vuelta de tuerca al ajustazo que sigue cayendo sobre los haberes previsionales, ya que en el primer trimestre del año las jubilaciones y pensiones están perdiendo más del 44% contra la inflación. Con la propuesta del gobierno, es imposible recuperar esa pérdida».
De acuerdo a su interpretación, en abril habrá un 12,5 por ciento de aumento, más un adelanto del aumento de junio; en mayo habrá un adelanto «a cuenta» del mes de junio; mientras que en ese mes aplicarán la movilidad clásica, vigente hasta hoy, pero descontarán los aumentos a cuenta y adelanto de abril y mayo. «En la práctica, lo más probable es que en el ingreso de bolsillo no se registre un aumento en junio; salvo -obviamente- el aguinaldo, que no es un aumento», puntualizó Rodríguez.
En julio, según él, aumentará de acuerdo al índice inflacionario de mayo, en agosto sobre el de junio y así sucesivamente. Es decir, el índice inflacionario sería aplicado con una demora de dos meses, según Rodríguez.
La noche del domingo, el ministro de Economía, Luis Caputo, defendió durante una entrevista en LN+ la nueva fórmula. «Al aumento del 30% que dimos el mes pasado ahora damos el 13,2% de febrero, más 12,5% de recomposición, más el bono. Ahora la mínima será de $ 172.000 más el bono, un 64% de recomposición», dijo.
«Nosotros les estamos dando (a los jubilados) el 64%. Lo sacamos por DNU y a partir de ahora se ajusta mensualmente. El próximo ajuste (por la ley anterior) era en junio», agregó.