La legisladora provincial Ana maría Zemerenko que cumplía su mandato el 10 de diciembre próximo falleció este miércoles en el sanatorio capitalino. Hace cuatro años que luchaba contra un cáncer. Desde las 17 será velada en el salón de los Pasos Perdidos de la Legislatura, y cerca de la medianoche sus restos serán trasladados a Oberá, de donde es oriunda, para ser inhumada en el cementerio de esa ciudad de la zona centro.
Con mucha dignidad sobrellevaba la enfermedad que puso fin a su vida. Fue objeto de homenajes de parte de sus pares de la Legislatura por esa entereza. Y en el acto de cierre del Frente Renovador para las elecciones del 23 de octubre, la vicegobernadora y entonces candidata al Senado Sandra Giménez le rindió homenaje por su lucha incansable, como exponente de la mujer misionera.
Y se habrá ido seguramente a un «mate literario» en el cielo. Porque cuando se despedía de su función como diputada provincial, decía a fines de octubre que se iría, parafraseando a Néstor Kirchner, «a un mate literario, para seguir estudiando, para seguir trabajando».
Es que era un 27 de octubre y entonces rendía homenaje al ex presidente fallecido y al despedirse como diputada afirmaba que «no tengo la sensación de irme. Pienso que sigo quedandome acá en esta Casa, donde tengo que agradecer a todos mis pares. Porque esta es una casa muy especial que se siente desde cuando nos acercan un paraguas porque llueve al trato que nos da, usted presidente», dijo aludiendo a Carlos Rovira.
Semerenko había agradecido a Dios por todo lo que le había sido dado, también por la posibilidad de ser diputada.