El gobernador Maurice Closs, en la continuidad de la agenda oficial, presidió la apertura de la Planta de Generación Eléctrica de Leandro N. Alem. En ese lugar dijo que en la jornada se aportaron cerca de 3 millones de pesos a distintos municipios. Observó que esa forma de generar energía «cuesta carísimo, hay que buscar capitales que inviertan y un gobierno que pague el subsidio. Y de esta manera podemos seguir generando 20-30-40 y 50 años más, como podemos generar de otras maneras. Pero este va a ser gran parte del debate, eso es lo que vamos a tener que decidir seguramente en 2014 o 2016 los misioneros cuando debatamos la cuestión de las represas. Eso es lo que se define, quién nos da la energía, y cuáles son las alternativas. En un país que viene creciendo, no al ritmo de Misiones, pero que va a necesitar montones de generadores de energía».
En el inicio de su discurso observó que cuando algo empieza a falta ahí empieza el problema. «Cuando uno ve un camión con un producto primario misionero y uno ve que empieza a faltar la yerba, no comienza el problema para los misioneros sino para los porteños que andan malos porque tienen que pagar caro el paquete. Mientras más caro valga el paquete de yerba mejor le va a ir a la economía misionera, cuando las cosas a veces faltan aparecen los problemas -insistió- y también las oportunidades», afirmó. En esa línea, sostuvo que la cuestión energética es fundamental entenderla desde esta perspectiva. «Es un problema que tenemos que falta energía», remarcó.
Seguidamente aportó un dato. En enero de 2008, cuando tenía días de haber asumido la Gobernación, el pico de consumo eléctrico había llegado a 300 megas. «Cumplido cinco años, en febrero de 2012 el pico llegó a 392 megas. Los misioneros consumimos un 30 por ciento más de lo que consumiamos en 2008. Eso no es malo, es bueno porque la provincia crece, porque hay industria que antes no estaban, por hay casas que antes no estaban o porque la que estaba ahora pusieron un aire acondicionado», resaltó para luego observar que esa energía de alguna manera hay que generarla.
«Y esa energía, en la provincia de Misiones, a razón de 30 megas se generó con esta planta (de Alem) y con la planta de Aristóbulo del Valle. Esta planta de capitales escoceses, consume por mes 1,5 millón de litros de combustible que está quemando y largando para arriba. Y saben cuánto pagamos los misioneros o la empresa de ese millòn y medio de litros de combustible», preguntó. «Cero, ahi están los subsidios que, a veces, se le cuestiona a la presidenta (Cristina Kirchner), ese es el corazón de la política de la Presidenta. Porque si ese subsidio se saca, si tiene que pagar la Provincia a lo que vale hoy el combustible, imagínense lo que sería. Solamente con esta planta y con la de Aristóbulo del Valle sería casi la facturación de Emsa, para generar el 10 por ciento de la energía que consume la provincia», enfatizó.
Closs expresó que comentaba esta situación porque ése será el debate que va a dominar gran parte de la historia del presente y del futuro de Misiones.
Luego observó que esa forma de generar energía «cuesta carísimo, hay que buscar capitales que inviertan y un gobierno que pague el subsidio. Y de esta manera podemos seguir generando 20-30-40 y 50 años más, como podemos generar de otras maneras. Pero este va a ser gran parte del debate, eso es lo que vamos a tener que decidir seguramente en 2014 o 2016 los misioneros cuando debatamos la cuestión de las represas. Eso es lo que se define, quién nos da la energía, y cuáles son las alternativas. En un país que viene creciendo, no al ritmo de Misiones, pero que va a necesitar montones de generadores de energía».
Más adelante, el Gobernador comentó que si no se quiere «o contaminar de esta manera, como se está contaminando o hacer el impacto ambiental como se había y si sigue la represa que nadie duda que es fuerte, los misioneros y los argentinos no debemos crecer 30 por ciento en consumo de energía en cuatro o cinco años porque esa energía de alguna manera hay que generarla. Y alguien tiene que hablarlo con claridad a las cosas, sin dogmatismos, sin decir sí o sí a las represas o no-no a las represas, Sin decir sí o sí a quemar combustibles».
