China dice compartir metas de EUA sobre la península coreana

China comparte «intereses y metas» con Estados Unidos respecto a temas de la península coreana, dijo el miércoles un diplomático chino, mientras las Coreas rivales volvían a relacionarse por primera vez en semanas mediante un reabierto acceso fronterizo.

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El Norte, que ha pedido conversaciones casi a diario desde inicios de año, volvió a ofrecer una mesa de negociación al proponer discusiones para reabrir cruces turísticos, cortados luego que un turista surcoreano fuera baleado en el 2008.

Seúl dice que su empobrecido vecino sólo busca charlas a fin de ganar ayuda y apoyo financiero. y que sólo sostendrá «conversaciones reales» sobre dos ataques mortales del año pasado contra el Sur.

El vicecanciller chino, Cui Tiankai, reiteró el miércoles los llamados a reiniciar las conversaciones de seis partes para el desarme nuclear de Pyongyang, antes de la visita del presidente chino, Hu Jintao, a Estados Unidos del 18 al 21 de enero.

Probablemente Obama exhortará a Hu a elevar la presión sobre Corea del Norte, aliado de China, que desató preocupaciones sobre la seguridad regional el año pasado tras los dos ataques contra Corea del Sur y revelaciones de avances en su programa nuclear.

«China y Estados Unidos comparten intereses y metas amplias en asuntos sobre la península (coreana)», dijo Cui en una rueda de prensa en Pekín. «Ambos países creen que debemos proteger la paz y estabilidad de la península», agregó.

Pekín cree que la reanudación de las conversaciones de seis partes, realizadas por última vez en el 2009, son la clave para resolver el enfrentamiento más reciente entre ambas Coreas, que técnicamente siguen en guerra tras firmar una tregua en 1953.

Las relaciones entre ambas Coreas alcanzaron su nivel más bajo en años tras el hundimiento de una corbeta surcoreana y el bombardeo de una isla surcoreana el año pasado, incidentes en los que murieron un total de 50 personas.

El Norte niega la acusación de Seúl de que torpedeó el barco y dijo que atacó la isla después de que misiles surcoreanos cayeron en sus aguas.

El Gobierno del presidente surcoreano, Lee Myung-bak, se encuentra bajo presión por lo que se percibió como una respuesta débil y prometió devolver el golpe con fuerza la próxima vez que sea atacado, tomando represalias con la fuerza aérea y bombas.

Washington y Pekín llamaron a ambos bandos a mostrar compostura, preocupados de que la situación se salga de control rápidamente.