Brasil Elige | Lula, sacó más de cinco puntos de ventaja, pero no alcanzó para ganar en primera vuelta a Bolsonaro

Alrededor de 156,4 millones de brasileños votaron este domingo a presidente, entre el jefe de Estado de derecha Jair Bolsonaro, que busca la reelección, y el ex mandatario y favorito supuesto en las encuestas, Luiz Inácio Lula da Silva. Lula logró la mejor posición, pero habrá segunda ronda, contra pronósticos que le daban ganador en primera vuelta.

El resultado dio por ganador a Lula Da Silva quien superó a Jair Bolsonaro por 48,36 contra 43,26 %, cuando se llevaban escrutados el 99,75% de los votos emitidos.

En el gráfico siguiente, los datos en porcentajes y votos para comparar.

​Como ninguno de los candidatos alcanzó el 50% del electorado, habrá balotaje el próximo 30 de octubre.

Los estados limítrofes con la provincia argentina de Misiones -Paraná, Santa Catarina y Río Grande do Sul, se mostraron con fuerte adhesión a Jair Bolsonaro.

En Santa Catarina y Rio Grande do Sul habrá, como a nivel nacional, segunda vuelta.

«Vamos salir a hablar con el pueblo. Prepárense», instó Luis Inacio Lula Da Silva, y recordó que él nunca ganó una elección en la primera vuelta. «Lo que es importante en la segunda vuelta es la chance de madurar el voto y mostrarle al pueblo cómo vamos a gobernar ese país», estimó.

«Yo era considerado una persona afuera de la política y yo decía que íbamos a volver con más fuerza y más voluntad», dijo Lula Da Silva en sus primeras declaraciones tras los comicios.

«Durante toda esta campaña, tuvimos enfrente las encuestas de la opinión pública. Algunos nos ubicaban en primer lugar y yo siempre pensé que íbamos a ganar las elecciones y que vamos a ganar estas elecciones», aseguró respecto de los resultados de este domingo.

​ Luego atacó a su rival político, Jair Bolsonaro. «Nuestro país está peor. La calidad de todo no está bien, la salud no está bien y tenemos que recuperar al país desde el punto de vista de las relaciones internacionales», analizó.»Para evaluar lo que está pasando hoy, tenemos que evaluar lo que estaba sucediendo años atrás. Yo era considerado fuera de la política y siempre dije que retornaría con más fuerza y voluntad», insistió.

Luiz Inácio Lula da Silva (Caetés; 27 de octubre de 1945), más conocido como «Lula», fue obrero metalúrgico,​ sindicalista y político progresista brasileño que ejerció las funciones de 35° presidente de la República Federativa del Brasil entre el 1 de enero de 2003 y el 31 de diciembre de 2010. Miembro fundador y presidente honorario del Partido de los Trabajadores, Lula obtuvo la victoria en las elecciones de 2002, y fue investido presidente el 1 de enero de 2003. En las elecciones de 2006 venció otra vez y obtuvo un segundo mandato como presidente, el cual finalizó el 31 de diciembre de 2010.​

Candidato a la presidencia de Brasil en varias ocasiones —en 1989, 1994 y 1998—, no fue hasta 2002 cuando logró obtener la victoria. Durante sus ocho años como presidente de Brasil, hizo reformas y radicales cambios que produjeron la transformación social y económica de Brasil, que triplicó su PIB per cápita según el Banco Mundial, al punto de convertir a la República en una potencia mundial.

A la salida de Lula de la presidencia, 52 millones de personas —el 27% de la población total— se beneficiaban del programa Bolsa Familia. En el plano internacional, jugó un papel destacado en asuntos como el programa nuclear de Irán y los debates sobre el cambio climático.

Lula abandonó la presidencia con una gran popularidad, tanto en Brasil —contando con más de un 80 % de aprobación— como en el resto del mundo. En octubre de 2011, a Lula —fumador durante más de 40 años— se le diagnosticó un cáncer de garganta y empezó a recibir un tratamiento de quimioterapia con el que meses después superó la enfermedad y pudo reanudar sus funciones.

En marzo de 2016, en medio del escándalo de corrupción de Petrobras y 11 días después de su detención para ser interrogado por su supuesta participación, fue nombrado ministro de la Casa Civil por el gobierno de Dilma Rousseff. Este nombramiento fue inmediatamente suspendido por un juez del Supremo Tribunal Federal en Brasilia, pero procedió al día siguiente, después de que un tribunal de Río de Janeiro levantara la medida cautelar que impedía su nombramiento, aunque de nuevo el mismo día volvió a ser suspendido por el juez Gilmar Mendes, miembro del Supremo Tribunal Federal de Brasil.

El 12 de julio de 2017 Lula fue condenado en primera instancia a nueve años y seis meses de prisión por el juez Sérgio Moro, siendo la primera vez en la historia de Brasil que un expresidente era condenado por corrupción pasiva. Tras lo cual se entregó el 7 de abril de 2018 y estuvo 580 días encarcelado e imposibilitado de presentarse a las elecciones presidenciales de 2018, que ganó Jair Bolsonaro, quien a su vez nombró al juez Moro como ministro. El 8 de noviembre de 2019, tras cumplir su sentencia, se ordenó su liberación.

El 8 de marzo de 2021 uno de los jueces de la Corte Suprema anuló todas las sentencias dictadas contra Lula, debido a que el juez Moro carecía de competencia para entender en los supuestos delitos que le imputó y por ende se inició una investigación en contra del magistrado.

En 2022, presentó oficialmente su candidatura presidencial para participar en las elecciones de este año.

Jair Messias Bolsonaro, el presidente que busca un nuevo mandato de cuatro años en Brasil, es capitán de la reserva del ejército, referente de la extrema derecha de América Latina, no ahorra insultos, exabruptos y acusaciones en sus apariciones públicas. Y en los últimos días intentó imponer la idea de que, si no gana, será porque hubo “fraude”.

Anticomunista a ultranza, no oculta su nostalgia de la dictadura brasileña (1964-1985) y de otros regímenes militares de los años 70 en varios países de América del Sur.

Suele calificar de «comunistas» a todos los líderes progresistas surgidos en los últimos años, desde el mexicano Andrés Manuel López Obrador hasta el argentino Alberto Fernández, sin pasar por alto al chileno Gabriel Boric y al colombiano Gustavo Petro.

A todos los menciona para descalificar a su principal rival este domingo, el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, candidato de un amplio frente progresista y el favorito de los sondeos.