Boca sufrió pero avanzó en la Copa Argentina

La historia se le complicó más de la cuenta al «Xeneize», al punto tal que un conjunto tres categorías inferior se le cerró hasta los minutos finales, en los que aparecieron Osvaldo y Chávez. El 2-0 depositó a los de Arruabarrena en la siguiente instancia de la Copa, donde se medirá ante Banfield. Algo de calma para los del «Vasco», tras la descalificación de la Libertadores y la dura derrota con Aldosivi por el torneo. En el ‘Bicentenario’ de San Juan, dirigió Pezzotta.

Lo que parecía ser un sencillo trámite se le fue de las manos a un Boca que estuvo conformado por mayoría de titulares. Rodolfo Arruabarrena no quiso arriesgar y puso toda la carne a la parrilla, aunque el asado casi se le quema. La hora le pasó al conjunto de La Ribera y cuando restaban menos de 10 minutos (incluyendo el descuento) para que definieran en penales, aparecieron los delanteros y sentenciaron la historia.

Daniel Osvaldo la tocó de cabeza tras un centro enviado por Calleri y abrió la cuenta, con la ayuda del arquero de Huracán Las Heras, que salió a cualquier parte y no pudo retomar su posición. Instantes más tarde, Meli también la armó por la banda derecha y encontró a Chávez, que desenfundó con la zurda y liquidó el pleito en el estadio Bicentenario de San Juan.

El centrodelantero celebra su gol. «Que la cuenten como quieran» dijo a la cámara a la vez que mostraba su musculosa de «La 25».

Durante la primera parte, el «Xeneize» lució impreciso y desdibujado, frente a un rival que fue más que digno y, pese a que no generó situaciones concretas de peligro, estuvo inclusive más alto de lo que las circunstancias ameritaban. Cerraron los espacios, fueron prolijos y criteriosos tácticamente y casi arrebatan un empate que pudo haberles regalado la clasificación desde los 12 pasos.

Después de los intentos de Osvaldo, Colazo y una maniobra en la que le sacaron el gol en la línea a Chávez, los últimos 45 minutos exhibieron a un Boca más activo, con Lodeiro en cancha y más voracidad, aunque poca efectividad. Sin lugar a dudas, la falta de confianza que provocaron la discutida y polémica eliminación con River en la Libertadores y la caída con Aldosivi por el torneo quedó expuesta en Cuyo, aunque el tanteador final puede servir como inflador anímico para lo que viene.

Luego de abrochar el pase a la siguiente instancia de la Copa Argentina, donde se medirá con el Banfield de Almeyda, los del «Vasco» ya tienen en la cabeza el cotejo del domingo con Vélez en Liniers, sabiendo que la meta antes del receso, será mantenerse en lo más alto del campeonato.