Boca Juniors, que ostenta un invicto de 27 partidos, se consagró campeón luego de tres años de sequía al golear este domingo, de local en una Bombonera repleta, a Banfield por 3 a 0, cuando aún restan dos fechas para la finalización del torneo Apertura de fútbol de primera división. Los goles del equipo que dirige Julio César Falcioni los anotaron el delantero Darío Cvitanich, a los 9 y 43 minutos del primer tiempo, y el volante Diego Rivero, al minuto del segundo. Con este resultado, Boca llegó a 39 puntos, 11 más que su escolta Racing Club y 12 por encima de Tigre (juega mañana con San Lorenzo), cuando quedan sólo 6 en juego.
Julio César Falcioni, «El Emperador», impuso finalmente su forma de gobierno y a menos de un año de su llegada ocupó el trono del «Virrey» Carlos Bianchi con la conquista del 24to. título local en la historia de Boca Juniors.
El campeonato, logrado dentro de una serie invicta que acumula 27 partidos, coronó una gestión que tuvo en el comienzo la misma inestabilidad de sus antecesores.
Falcioni, de 55 años, llegó a Boca tres días antes de la Navidad de 2010 con un título con Banfield (Apertura 2009) como máximo lauro y un paso trunco por Independiente (2005-2006) en su única experiencia previa en un grande del fútbol argentino.
Su perfil de entrenador disciplinado en la convivencia y austero en lo futbolístico sedujo a la dirigencia para un plantel por entonces dividido entre dos figuras históricas (Martín Palermo y Juan Román Riquelme) y con bajos rendimientos en la era previa de Claudio Borghi.
Sin vínculos pasados con el mundo «xeneize», Falcioni arribó con el desafío de construir poder puertas adentro y dotar al equipo de una identidad ausente desde la anterior conquista de la mano de Carlos Ischia en 2008.
Después de un verano exitoso a principios de año, sufrió un «mazazo» en el debut oficial (1-4 con Godoy Cruz en La Bombonera) y quedó prematuramente fuera de la pelea por el Clausura con cuatro derrotas en las seis primeras jornadas.
En aquel lapso, convivió con preguntas sobre su continuidad, miradas desconfiadas y el malhumor de Riquelme, a quien marginó de la titularidad por un estado físico maltrecho ante distintas dolencias.
Los bajos rendimientos de Walter Erviti y Leandro Somoza, refuerzos especialmente pedidos por el DT; una sequía de once partidos de Palermo y el desplazamiento del arquero Javier García -amigo íntimo de Riquelme- por indisciplina lo pusieron en el momento de mayor incomodidad en el banco de Boca.
El 10 de abril pasado perdió con Lanús (2-1), por la novena fecha, en lo que sería su última derrota y el inicio de una recuperación lenta e imperceptible hasta la coronación.
La reaparición de Riquelme, la vuelta al gol de Palermo hasta su retiro y el reordenamiento de la defensa le permitieron cerrar un digno Clausura con una racha de cuatro victorias y seis derrotas.
Y con la llegada del arquero Agustín Orión, el defensor Rolando Schiavi -clave para la nueva estructura- y el delantero Darío Cvitanich -a quien había dirigido en Banfield- reunió los recursos necesarios para un equipo a su medida.
Así, Boca se constituyó en el Apertura como un conjunto con seguridad en el arco y la última línea, combatividad en el mediocampo, donde Riquelme volvió a brillar como en sus mejores etapas, y efectividad en sus delanteros.
Los números de la campaña invicta lo legitimaron como inobjetable campeón: once victorias, seis empates, 22 goles a favor y apenas cuatro en contra en 17 partidos.
La solidez colectiva jamás se resintió pese a las lesiones transitorias de Riquelme, Cvitanich, Diego Rivero, Lucas Viatri y hasta Nicolás Blandi, que empezó el torneo como cuarto delantero.
El típico gesto adusto de Falcioni, fechas tras fecha, se convirtió en una amplia sonrisa. Aferrado a su metodología, «El Emperador» ocupó el trono del «Virrey» y sueña con pulverizar su invicto de 40 partidos en Boca.
Banfield, en tanto, es la contracara ya que continúa en el último lugar de la tabla de posiciones con apenas 11 unidades.
El equipo local empezó a definir el partido con el primer gol de Cvitanich (ex Banfield), a los 9 minutos, y después lo controló con su habitual solidez en defensa y criterio en el mediocampo.
Y lo terminó de definir, a 120 segundos del final de esa misma etapa, con otro grito de Cvitanich (el cuarto en el torneo).
Entre un gol y otro pasó poco y nada en el partido, ya que Boca lo reguló y manejó a su gusto y Banfield fue víctima de sus propias limitaciones futbolísticas.
Sin embargo, el espectáculo estuvo en las tribunas, con la fiesta que protagonizaron los casi 50 mil hinchas que le dieron un marco imponente a La Bombonera.
Juegos artificiales, papelitos, cánticos (algunos dedicados a los simpatizantes de River, que hoy juega en la B Nacional), banderas y muchas camisetas azules y amarillas le dieron color a la tarde-noche.
Pero también hubo un segundo tiempo y cuando recién iban poco más de 60 segundos, Rivero convirtió un verdadero golazo. El 3-0, a esa altura, era anecdótico.
Es que todo el pueblo boquense esperaba por el ingreso de Juan Román Riquelme, el máximo ídolo en la actualidad, que arrancó en el banco porque aún lo aqueja una fascitis plantar en el pie izquierdo.
Y Falcioni les dio el gusto a los 19 minutos. Así el «10» volvió a jugar luego de cinco fechas. Su último partido había sido en el empate sin goles frente a Belgrano de Córdoba, en La Bombonera, por la undécima jornada.
Con Riquelme en cancha, la fiesta fue completa. Fue la frutilla del postre. Así, con el ídolo en el campo de juego (alcanzó los 600 partidos), Boca dejó atrás tres años para el olvido. Celebró su 24to. título y gritó campeón.
Boca Juniors obtuvo su 24º título en el fútbol nacional en el profesionalismo, lista que se inició con el campeonato de 1931.
Los títulos de Boca son los siguientes:
– PROFESIONALISMO – Campeonato 1931 Campeonato 1934 Campeonato 1935 Campeonato 1940 Campeonato 1943 Campeonato 1944 Campeonato 1954 Campeonato 1962 Campeonato 1964 Campeonato 1965 Torneo Nacional 1969 Torneo Nacional 1970 Torneo Metropolitano 1976 Torneo Nacional 1976 Torneo Metropolitano 1981 Torneo Apertura 1992 Torneo Apertura 1998 Torneo Clausura 1999 Torneo Apertura 2000 Torneo Apertura 2003 Torneo Apertura 2005 Torneo Clausura 2005 Torneo Apertura 2008 Torneo Apertura 2011 Boca ganó además el Clausura 1991, pero perdió la final con Newell’s, ganador del Apertura.
– AMATEURISMO – Campeonato 1919 Campeonato 1920 Campeonato 1923 Campeonato 1924 Campeonato 1925 Campeonato 1926 Campeonato 1930 – INTERNACIONALES – Copa Libertadores (6): 1977, 1978, 2000, 2001, 2003, 2007.
Copa Intercontinental (3): 1977, 2000, 2003.
Supercopa (1): 1989.
Copa Sudamericana (2): 2004, 2005.
Recopa Sudamericana (4): 1990, 2005, 2006, 2008.
Copa Master (1): 1992.
Copa Nicolás Leoz (1): 1993.
