Argentinos de vacaciones pero que no dejan de lado las costumbres

Un aluvión de compatriotas invade las playas del país vecino por la diferencia de cambio.

En esta temporada, una mayor cantidad de turistas locales prefirieron vacacionar en Brasil y Uruguay antes que en la costa argentina. Si bien es una tendencia que vino aflorando en los últimos años, lo que inclinó aún más la balanza en esta temporada fue la liberación del cepo cambiario y el descalabro de los precios locales, que se profundizó a raíz de la inflación y la devaluación de diciembre.

“Seis jóvenes de no más de 25 años toman mate en la playa mientras escuchan cumbia en el celular. Al lado, dos hombres, uno con la camiseta de la selección argentina y otro con la de Boca Juniors, miran al mar y conversan en español”. Esta escena, retratada por el Folha de San Pablo, es la que se puede ver un día cualquiera en Florianópolis, uno de los principales territorios “invadidos” por los argentinos desde diciembre.

La prensa local observó, además, el consumo de mate y choripán que existe entre los visitantes. Un comerciante, que dice vender 80 unidades de la popular comida nacional por día, declaró: “Es una temporada muy buena, sobre todo gracias a los argentinos. Si no fuera por ellos, yo no estaría acá”.

Los argentinos sostienen que en Brasil los precios son mejores

Según datos del Instituto Brasilero de Turismo, son dos millones de turistas que están de vacaciones, por lo que hubo un aumento del 20 por ciento en relación al verano 2014/2015. Y de esa cifra, se calcula que 1,1 millones eligen las playas de Santa Catarina y la isla de Florianópolis como destino principal.

El cónsul de la Argentina en Florianópolis, Octavio La Croce, explicó que “los argentinos adoran las playas del norte” y sostuvo que fue la devaluación del real lo que llevó a que “muchas familias comenzaran a hacer reservas, adelantar pagos y paquetes turísticos”. La Croce agregó que será una temporada récord de argentinos en Santa Catarina, “por lo menos de los últimos 10 años”, estimó.