Argentina / Economía | Inflación explotada: Familia argentina necesitó en enero $ 600 mil para no ser pobre

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó el miércoles que la canasta básica de enero subió 20,4% y una familia tipo necesitó $596.823,18 para no ser pobre. En tanto, se precisaron $285.561 para no caer en la indigencia

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó el miércoles que la canasta básica de enero subió 20,4% y una familia tipo necesitó $596.823,18 para no ser pobre. En tanto, se precisaron $285.561 para no caer en la indigencia. En ese monto no se contabiliza vivienda, educación o medicaciones.

El salario mínimo vital y móvil es de 156 mil pesos y una jubilación mínima ronda los 105 mil pesos. En tanto la inflación llegó al 20,6%. Así los dos primeros meses del anarcocapitalista presidente Javier Milei en sus dos primeros meses de gobierno acumula una inflación del 46 %. Los niveles de pobreza ya deben estar por arriba del 50 % de los habitantes de la Argentina.

En diciembre, la canasta básica había marcado que para no ser pobre se necesitaban $495.798, siempre hablando de una familia integrada por una pareja y dos hijos.

El último dato oficial de pobreza, correspondiente al primer semestre del año pasado, marcó que el 40,1% de la población había caído en esta condición. El próximo dato oficial llegará recién en marzo y aún no tendrá el impacto de la fuerte inflación de enero.

En el dato difundido por el INDEC este miércoles, se calculó que la línea de indigencia para la unidad estadística de un “adulto equivalente” fue $92.415. En el caso de la pobreza, fue de $193.147.

Un hogar de 3 integrantes necesitó $227.340 para no ser indigente y $475.141 para no ser pobre. Por último, la Canasta Básica Alimentaria para una familia de 5 miembros asciende a $300.348 y la Canasta Básica Total se ubica en $627.727.

El Gobierno, en tanto, estimó que después de la devaluación de diciembre y el salto de la inflación al 25,5% -la más alta en 30 años-, la pobreza ya orillaba el 50% de la población.

El dato, que no se registra desde hace dos décadas, figura en la carta de intención presentada por la Argentina para el informe del staff del Fondo Monetario Internacional aprobado a fines de enero.

Según el informe del Indec, “la división de mayor aumento en el mes fue Bienes y servicios varios (44,4%), producto del incremento en artículos de Cuidado personal. Le siguieron Transporte (26,3%) –por las subas en transporte público y el arrastre del aumento de combustibles– y Comunicación (25,1%), por el alza en servicios telefónicos y de internet”.

“La división con mayor incidencia en todas las regiones fue Alimentos y bebidas no alcohólicas (20,4%). Al interior de la división se destacan las subas de Carnes y derivados y Pan y cereales. Las dos divisiones que registraron las menores variaciones en enero fueron Prendas de vestir y calzado (11,9%) y Educación (0,9%)”, agregó el informe.
Dentro de la conformación del índice promedio de 20,6% se destacó la diferencia entre los precios estacionales (frutas, verduras y todos los servicios vinculados al turismo) que se incrementaron en un 16,2% y los precios regulados, que subieron un 26,6%, por encima del promedio. En este último punto aparecen servicios cuyos precios empezaron a ser liberados, tales como el transporte y las tarifas de electricidad, gas o agua. El resto de los productos y servicios relevados dentro del índice, conocido como “IPC Núcleo” tuvieron un aumento del 20,2%, muy cercano al índice promedio.