Régimen libio reprime y contabilizan 200 muertos

El Departamento de Estado norteamericano se mostró «muy preocupado por los alarmantes informes e imágenes» de la represión del régimen de Muammar Khadafi y llamó a las autoridades de Trípoli a autorizar las manifestaciones pacíficas. Según el sitio Lybya Al Youm serían 200 las víctimas fatales mientras que Human Rights Watch contabiliza 173.

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Las caídas de Hosni Mubarak en Egipto y Zine el Abidine Ben Alí en Túnez envalentonaron a los opositores de varios países de Medio Oriente y el norte africano, que se muestran dispuestos a protestar en busca de mayores libertades y el fin de algunos los regímenes dictatoriales.

A diferencia de la decisión adoptada semanas atrás por el Ejército egipcio de separarse de las decisiones oficiales y evitar reprimir al pueblo, las manifestaciones están siendo ahora brutalmente atacadas provocando centenares de muertos y miles de heridos.

Uno de los países más afectados es Libia, en donde según la ONG Human Rights Watch 173 personas murieron por el accionar por las fuerzas de seguridad desde el martes, cuando comenzaron las protestas. El régimen de Khadafi ha bloqueado el acceso a internet para evitar que los manifestantes puedan convocarse, pero tal medida no alcanzó para evitar que miles de personas hicieran escuchar sus reclamos en distintas ciudades del país.

«Estados Unidos está provenientes desde Libia», dijo el portavoz del departamento de Estado Philip Crowley, en un comunicado. «Estamos investigando para confirmar los datos, pero hemos recibido múltiples informes creíbles que dan cuenta de que centenares de personas murieron o resultaron heridas en estos días de disturbios, y que aún no se conoce el balance de muertos debido a la falta de acceso de la prensa internacional y de organizaciones humanitarias», agregó. «Estados Unidos está muy preocupado por los informes alarmantes y las imágenes provenientes de Libia», precisó.

Al menos 173 personas murieron en Libia desde el martes en la represión de las manifestaciones contra el régimen, según un balance de la organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) anunciado el domingo, día en que la protesta se acercaba hacia la capital, Trípoli.

«Hay 173 muertos. Es un balance prudente basado en fuentes hospitalarias en el este de Libia, en Benghazi y otros tres lugares», dijo a la AFP Tom Porteous, portavoz de HRW, con sede en Nueva York.

«Es un balance incompleto y también hay un gran número de heridos. Según fuentes médicas en Libia, las heridas indican que se están usando armas pesadas contra los manifestantes», añadió Porteous.

El departamento de Estado indicó que Estados Unidos «expresó su fuerte rechazo al uso de la violencia letal contra manifestantes pacíficos a dirigentes libios, entre ellos el canciller Musa Kusa».

 

La información circula bajo muchas restricciones en Libia, donde los periodistas no pueden trabajar libremente y algunas de las declaraciones no pueden ser confirmadas de forma independiente.

 

Los manifestantes libios salieron a la calle por quinto día, pero Khadafi, que tiene 42 años en el poder, ha tomado una posición intransigente contra el disenso que recorre el Medio Oriente y amenaza con barrerlo.

 

Manama, como El Cairo

 

Los 19 días de protesta que antecedieron a la salida de Mubarak en Egipto fueron inspiradores para varios de estos países, pero quienes intentan emular con mayor fidelidad esa lucha es la oposición de Bahréin.

 

La plaza La Perla de la capital, Manama, es una réplica a escala de lo que sucedió en la plaza Tahrir, en El Cairo. Miles de manifestantes montaron un campamento en ese lugar y aseguraron que no se irán de allí hasta que el régimen dimita.

El gobierno, en tanto, accedió a retirar de la plaza a la policía y el Ejército mientras se desarrollan las negociaciones entre los representantes del régimen y los delegados que ha nombrado a la oposición para encontrar una salida al conflicto.

Violencia en Yemén
Como ocurrió en Libia, las fuerzas del orden yemeníes dispararon contra los centenares de manifestantes que piden la salida del presidente Ali Abdulá Salé.

Al menos 10 personas han muerto en ese país desde que comenzaron las protestas, hace cinco días.

La represión policial está también complementada con la que llevan adelante partidarios del gobierno, armados con cuchillos, bates y piedras.

En Argel, unos 200 manifestantes que corearon «Argelia libre y democrática», «poder asesino» o «el pueblo quiere que caiga el régimen», se congregaron el sábado en el centro de la ciudad, pese a un impresionante despliegue de las fuerzas de seguridad.

Un diputado de la opositora Asamblea por la Cultura y la Democracia (RCD), Tahar Besbas, fue gravemente herido en un enfrentamiento con la policía durante la manifestación y parecía en estado de coma, según un miembro de su partido.

En Yibuti, otro pequeño país del cuerno del África separado de Yemen por el Mar Rojo, un policía y un manifestante murieron el sábado en enfrentamientos tras una gran manifestación opositora en la capital, indicó el ministerio del Interior en un comunicado.

En Irán, el régimen de Mahmud Ahmadinejad prometió que reprimirá cualquier intento de la oposición por hacer escuchar sus reclamos. El anuncio se dio luego de que se conociera que este domingo habrá una manifestación en las calles de Teherán.