Las elecciones primarias abiertas, simultáneas y obligatorias serán el 14 de agosto del año que viene, luego de que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner firmara los decretos que reglamentan la reforma política. El anuncio lo hizo el ministro del Interior, Florencio Randazzo. «Es una elección primaria, abierta, simultánea y obligatoria, no es una elección interna», explicó Randazzo en Casa de Gobierno, y dijo que «actúa sobre el comicio al Justicia Electoral Nacional; como ministerio somos auxiliares».
En ese sentido, subrayó que «el tribunal de alzada es la justicia electoral».
Agregó que «el espiritu es ser facilitadores para que los partidos puedan cumplir».
El funcionario señaló además que quienes hayan cometido crímenes de lesa humanidad no podrán participar de los comicios, mientras que aquellos afiliados a partidos que quisieran desafiliarse podrán hacerlo en juzgados federales o con un telegrama que ya está en todas las sedes del correo.
Respecto al financiamiento de las campañas, adelantó que sólo podrán hacer aportes las personas físicas y que se suspende el aporte de personas de existencia ideale. Para recibir esos aportes se abrirá una cuenta única para cada partido en el Banco Nación.
Sobre el reparto de fondos, la distribución será de 50% a todos los partidos y el otro 50% de acuerdo a los sufragios que hayan obtenido en comicios legislativos, reemplazando la antigua proporción de 30% y 70% respectivamente.
La publicidad será gratuita, la mitad para todos los partidos, y el 50% restante de acuerdo a la cantidad de sufragios en la ultima elección.
«Todos los partidos coincidieron en la necesidad de tener igualdad de oportunidades para ofrecer sus propuestas y mostrar sus candidatos. Se acordó prohibir la publicidad audiovisual privada», fundamentó Randazzo.
En cuanto a las alianzas, el ministro dijo que los partidos deberán definirlas 60 días antes del desarrollo de la primaria abierta simultánea y obligatoria y esta decisión va a quedar congelada hasta las elecciones generales. «Es inmodificable», apuntó.
«No es obligatorio asignarle un nombre, para que lo puedan determinar aquellos que triunfan en la primaria», agregó Randazzo.
Entre otras modificaciones también se contempló el trabajo conjunto del Registro Nacional de las Personas y la justicia electoral, con el objetivo de tener un padrón actualizado. Se estableció un límite de 350 votantes por mesa y se incorporó la figura del elector ausente por desaparición forzosa.
El funcionario explicó que «quien determina la condición de aquellas personas es la Secretaría de Derechos Humanos. La idea es que al final del padrón estas personas van a aparecer sombreadas y va a aparecer esta condición», amplió el funcionario.