La Justicia cerró la causa penal sobre el avión militar estadounidense

El juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky cerró, por inexistencia de delito, la causa abierta por el material no declarado del avión militar estadounidense tras la presentación del informe de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). 

avion-de-euaEl juez Aguinsky fundamentó el archivo del sumario en ese informe «que coincidió con las declaraciones de 21 testigos» y «numerosas medidas de prueba ordenadas» durante la instrucción.

«No quedó prueba por producir» y «todos los elementos reunidos conducían al cierre de la pesquisa», dijo un allegado a la investigación.

Sobre el informe requerido por la justicia, la AFIP informó en un comunicado que «la intervención aduanera tuvo lugar a partir de las diferencias constatadas entre lo declarado por las autoridades estadounidenses y lo efectivamente verificado, a instancias de las acciones de control ordinarias del organismo».

Entre las mercaderías secuestradas se destacan, «armas, equipos para comunicación, medicamentos y psicotrópicos, muchos de ellos vencidos».

La Aduana ratificó que «se trata de una contravención a las normas aduaneras y por lo tanto es un hecho cuyo juzgamiento corresponde al juez administrativo que podría aplicar la sanción de multa, comiso y destrucción».

La AFIP señaló también que el informe presentado por la Aduana al juez Aguinsky comprendió -entre otros aspectos- «un resumen pormenorizado de lo actuado por el servicio aduanero a partir de los controles propios y de la constatación de inexactitudes entre la mercadería presentada por las autoridades militares de EE UU -según packing list- y la declarada en la Solicitud de Admisión Temporaria presentada a instancias de la embajada de los EE.UU».

El organismo expresó además, que es objeto de investigación, en el marco del sumario que se sustancia, conocer «cuál sería el uso potencial de los equipos de comunicación en nuestro país, sus funciones principales y accesorias o complementarias, si las tuvieran, y cual hubiera sido el motivo por el cual un equipamiento tan sensible y de fuerte tutela por parte de militares estadounidenses, no se hallaban declarados correctamente».

Con respecto a las armas, la Aduana destacó que se trata de armas automáticas que pueden tirar a repetición una importante cantidad de proyectiles y que fueron utilizadas por EE.UU. en la guerra del Golfo y Afganistán. Y agregó que su uso, en ese país, se encuentra vedado para particulares. Por lo que «su ingreso irregular, tal como se ha constatado, podría haber ocasionado que quedaran en el país en el mercado ilegal de armas».

«El personal de la sección verificaciones de la Aduana practicó el detalle, clasificación arancelaria, alícuotas vigentes e intervenciones requeridas para el ingreso a plaza de la mercaderías que se encuentran alcanzadas por las actas de fecha 10 y 11 de febrero pasado», agrega el comunicado.

La Aduana afirma en el contenido del informe, que «se está frente a una contravención aduanera, tipificada por el Art. 954 y 977 del Código Aduanero, donde el juez administrativo interviniente podrá aplicar la sanción de multa, comiso y destrucción».