El pontìfice instò a «dar recepción y hospitalidad» a los inmigrantes «teniendo en cuenta los derechos y los deberes recíprocos de quien acoge y quien es acogido».
El papa Francisco afirmó este miércoles que la emergencia de los refugiados y de la inmigración es la «tragedia más grande después de la II Guerra Mundial», durante la audiencia general celebrada en la Plaza de San Pedro. Jorge Bergoglio saludó tras celebrar la audiencia a miembros de la Fundación «Migrantes» y les animó a continuar su empeño «para dar recepción y hospitalidad a los refugiados e inmigrantes teniendo en cuenta los derechos y los deberes recíprocos de quien acoge y quien es acogido».
A lo que agregó que «no hay que olvidar que el problema de los refugiados, de los inmigrantes, es hoy la tragedia más grande después de la II Guerra Mundial». La fundación «Migrantes» ha sido puesta en marcha por la Conferencia Episcopal Italiana y se encarga de organizar la acogida a los refugiados que llegan al país.