Con la habitual ironía que caracteriza a los personajes creados por Matt Groening quedó clara cuál es la opción por la que Homero se inclina tras una discusión en la cama con Marge.
«No puedo hacer el amor sin decidir por quién votar», reclama Marge Simpson en el capítulo en el que la famosa serie se metió de lleno en la próxima campaña presidencial con los dos candidatos ya definitivos.
Los Simpson imaginaron cómo sería la presidencia bajo el mandato de Hillary Clinton y Donald Trump. Con ironías y exacerbaciones, Homero termina con su opción por cierta presión y descarte «Y así es cómo me convertí en demócrata».
Un reflejo, seguramente, sobre cómo muchos estadounidenses ven la próxima elección a presidente, en noviembre de este año, donde la contienda entre demócratas y republicanos también tiene sus internas.
Este episodio de los Simpson retoma la parodia realizada por seguidores de Hillary Clinton que muestra a Trump como un presidente «peligroso».