La presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, afirmó que su presencia en Turquía «significa una nueva etapa en las relaciones bilaterales» y destacó que ambas economías «sostienen su crecimiento luego que se produjera la crisis global en el último trimestre de 2008». Así lo dijo la Jefa de Estado desde el Palacio Oficial de Ankara, tras un encuentro con su par turco, Abdullah Gül, quien previamente, destacó que «la voluntad de los países es llevar más adelante las relaciones».
Cristina resaltó las coincidencias entre la Argentina y Turquía al afirmar que «ambos somos países con economías emergentes que han definido la actividad económica de la última década y también sostienen el crecimiento de la actividad económica luego de que se produjera la crisis global en el último trimestre de 2008».
«Además de ser ambos miembros del G20, esto anuncia un tiempo y un mundo de cambios. Prefiero llamar tiempos de cambios en vez de tiempo de crisis como otros mencionan, porque es de oportunidades para aquellos países que no teníamos la posibilidad de ser protagonistas en el mundo global», señaló la Presidenta.
Cristina aludió al discurso de su par turco, en el que celebró que en 2010 se cumplieron 100 años de historia de relaciones entre el Imperio Otomano y la Argentina, y al referirse al dominio del imperio dijo que los gobernantes «debemos comprender las profundas modificaciones que se han producido en el siglo pasado y en éste» y que define que «nada es para siempre y que todo depende de una construcción que todos debemos hacer».
La Presidenta puntualizó los temas tratados con su par turco, como la «reorganización de Naciones Unidas, la reformulación de su Consejo de Seguridad, la necesidad de adecuar un derecho internacional a este mundo actual».
Destacó que el sistema financiero argentino durante la última crisis global fue «absolutamente solvente» y resaltó que «igual que Turquía, no tuvo que depositar un sólo dólar en cualquiera de sus bancos porque tenía un sistema absolutamente saneado».
Asimismo, reafirmó que en esta etapa de «transformaciones profundas» exige «otra lógica a la de la crisis de 2008» y dijo que «quienes más responsabilidad tienen en cambiar, son quienes más poder tienen».
«En política y en economía debemos guiarnos por los resultados, porque lo que nuestras sociedades exigen a sus gobernantes son resultados. La gente no come únicamente a partir de un discurso, no tiene mejor calidad de vida porque vaya a un templo a rezar a cualquier dios. Tenemos que dar respuestas concretas en mejorar la calidad de vida», enfatizó.
En ese sentido, Cristina aseguró: «Mi presencia aquí obedece a esa responsabilidad de lograr como Jefa de Estado, un país con mayor nivel de integración con todos los países del mundo y también con Turquía».
Al finalizar, Cristina definió a la Argentina como «un país con una matriz cultural muy cosmopolita» donde «no hay diferencias étnicas ni religiosas que nos dividan ni separen».
Antes, el presidente turco resaltó el momento actual como «una nueva página entre Argentina y Turquía, tras el reconocimiento mutuo en 1910» al puntualizar que «entre 1890 y 1903, 200 mil personas, emigraron y adoptaron la nacionalidad argentina».
«Es un lazo importante en nuestras relaciones y muestra que son muy fuertes y antiguas», dijo tras destacar el acuerdo firmado en transporte aéreo que permitirá tener vuelos directos entre los dos países.
Luego del encuentro con el presidente, Cristina se reunió con el primer ministro turco Recep Tayipp Erdogan.
Tras concluir el encuentro, la Presidenta viajará rumbo a Estambul donde concluirá la última jornada de la gira por Medio Oriente