El gobernador Maurice Closs señaló que el aún subsecretario de Turismo, Sergio Ferreyra, tendrá la misión de calmar los ánimos en EMSA y lograr que la empresa siga funcionando con normalidad. Lamentó los serios incidentes ocurridos el martes entre sindicalistas y trabajadores de la empresa y dijo que algunos «quieren romper la paz social de Misiones que no es patrimonio de la Renovación, sino que de todos los misioneros».
El Gobernador dijo que Ferreyra tiene básicamente dos premisas en Electricidad de Misiones SA. «La primera es que vuelva la tranquilidad que estuvo jaqueada por varios episodios y punto álgido en el día de ayer (martes) confirmado por la Policía, porque hubo balas inclusive. Ha sido un día duro, para el olvido para la memoria y la justicia que le toca investigar todo lo que se cometió ahí».
«Y esa consigna debe ir de la mano de poner todo el empeño para que la empresa de energía tenga el compromiso de toda su gente. Es una empresa querida por su gente y está al servicio de todos los misioneros y específicamente de los lugares donde tiene concesión. La energía que comercializa una cooperativa sale de esta empresa» aseguró el Gobernador.
Closs dijo además que (Héctor) «López Ricci todavía tiene el destino de EMSA. Yo he pedido la renuncia de todos los directores, pero no he considerado todavía la de ningún director. Todos siguen siendo directores de EMSA».
Closs rechazó que se hubiera tratado de una supuesta puja entre él y el presidente de la Legislatura Carlos Rovira, reiterando que es la «telenovela que no existe, pero estoy conciente que siempre hay quienes quieren hacer interpretaciones. Yo tomé las decisiones y son personas de mi extrema confianza». Pero señaló que se trata de «un espacio de la Renovación, que no es un juego de señoritas. Hay posiciones encontradas y disensos, pero no el triunfo de unos y la derrota de otros. Antes bien espero que sea el triunfo de una empresa de todos como es Emsa».
Admitió Closs que le «dolió lo ocurrido. «Claro que duele, sobre todo por el clima creado entre compañeros de laburo. Las cosas se desbordaron. Pero además hay gente a la que le duele en el cuero que la gente sea pacífica».