Lidia Papaleo: «Clarín y La Nación robaron Papel Prensa asociados con la dictadura»

Lidia Papaleo, la viuda de David Graiver, dueño de Papel Prensa hasta 1976, cuando murió en un accidente aéreo en México, afirmó que los diarios Clarín y La Nación le «robaron» la empresa, «asociados con la dictadura», y que firmó la venta de acciones «bajo presión» de Héctor Magnetto, el CEO del matutino que dirige Ernestina Herrera de Noble. lidia-papaleo-2

Papaleo sostuvo al diario Tiempo Argentino, medio con el cual habló tras 34 años de silencio, que quienes le «robaron» Papel Prensa a la familia Graiver fueron «el señor (Héctor) Magnetto, la gente de La Nación; los hechos lo demuestran, asociados con la dictadura».

También, dijo que a su marido lo asesinaron «porque murió de la forma más estúpida, contra un cerro, con un avión al que no le andaba el altímetro» y, en el marco de ese relato, la mujer contó que «días antes, un hombre mexicano Gabriel Alarcón, muy poderoso, que tenía un diario (El Heraldo), le dice a David: `Tu debes vender Papel Prensa, porque te va a costar la vida`».

En ese sentido, la viuda de Graiver indicó que «nunca entendí» por qué -según su versión de los hechos- «mataron» a su marido, y agregó que «yo supe, yo no tuve dudas, nunca» que fue asesinado.

«Papel Prensa significaba tener el monopolio del papel en el país, si no era manejado correctamente, pero la intención de David no era la de un monopolio, y por eso la forma en que él distribuyó las acciones», completó en un extenso reportaje publicado hoy.

Lidia Papaleo recordó que cuando llegó a la Argentina desde México vivió «la peor etapa; empecé por recibir amenazas inmediatamente después de morir David, en agosto de 1976».

Al ser consultada sobre quienes dice que recién ahora habla sobre lo que pasó en Papel Prensa, respondió: «Osvaldo, mi hermano, viene batallando por esto desde siempre; y en mi caso, cuando estaba presa, en dónde iba a explicar por qué mi marido no estaba para defenderse y defendernos de todo lo que nos estaba pasando» y añadió que «a mis compañeras de cautiverio, cuando me preguntaban, siempre les respondía que estaba ahí por Papel Prensa».

Papaleo aseguró que su cuñado Isidoro Graiver «miente» cuando niega que ella se haya cruzado con Magnetto el 2 de noviembre, el día de la firma de la venta de acciones de la compañía, advirtió que «Isidoro supo todo, y es más, yo le dije todo lo que me había dicho Magnetto», y agregó que los supuestos cambios en los dichos fueron «por dinero», en referencia a la solicitada que el hermano de David publicó la semana pasada en Clarín y La Nación.

Sobre la versión de los hechos de su hija María Sol, quien también mediante una solicitada se diferenció de «los dichos de la familia Papaleo» respecto a Papel Prensa, la viuda dijo: «Yo tuve siempre la mejor relación con mi hija y cuando salí de estar presa puse todo lo necesario para recuperar el vínculo, pero hace tres años que decidió que no tenía más nada que ver conmigo y obviamente hay intereses atrás de los que no puedo hablar».

En ese marco, añadió que la joven «probablemente está manejada por sentimientos muy controvertidos que hacen que sus comportamientos se conviertan en inexplicables».

Según Papaleo, «a través de todos estos años Clarín y La Nación dieron muchas pruebas de lo que estaban haciendo por el país, de lo que son capaces de hacer: comprar gente, hacer que la gente se venda para llegar a su fin, que no agrega ni saca a lo de María Sol», y agregó que «Isidoro ya declaró, así que lo que diga ahora; vamos a ver si coincide y si no coincide será falso testimonio».

Por otra parte, la mujer aclaró que «no había» relación entre la familia Graiver y la organización Montoneros.

Respecto a su declaración testimonial del jueves pasado en un juzgado de La Plata, señaló que «conté de qué forma firmé los papeles que firmé y las palabras textuales de Magnetto. Dije claramente que yo fui a firmar, pero firmé bajo la presión de Magnetto; supe que no tenía otra posibilidad más que firmar».

Para Lidia Papaleo, el anuncio de la semana pasada de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner respecto a Papel Prensa «fue la mayor alegría, un momento muy emocionante», y añadió que «cuando estuve la segunda vez con Cristina me preguntaron y dije que sabía que cuando estaba con ella, cuando la miraba, que iba a hacer lo que me había dicho: ir a la Justicia y al Parlamento».

Sobre el final de la nota, La viuda de Graiver admitió que «no tengo miedo a un secuestro» pero alertó que «sí creo que puedo tener un accidente» y por eso «no salgo sola, miro por la calle», al tiempo que adelantó que «voy a pedir ser testigo protegido».

También salió al cruce del ex fiscal Julio César Strassera, quien la semana pasada aseguró que cuando le tomó declaración a Lidia Papaleo «nunca vinculó la venta a un hecho ilegal», al sostener que en ese entonces «nunca me preguntaron de Papel Prensa».

Finalmente, Lidia Papaleo se manifestó confiada en que la historia sobre la polémica venta de Papel Prensa terminará «bien, con la verdad, con la verdad acumulada durante 34 años».

«Los papeles están, las pruebas están; la palabra no sirve, la prueba es irrebatible», concluyó.

No estaba presa, pero eso no significa que estaba en libertad», advirtió la viuda del ex dueño de Papel Prensa

Lidia Papaleo, la viuda de David Graiver, dueño de Papel Prensa hasta 1976, cuando murió en un accidente aéreo en México, afirmó el domingo 29 por la noche que al momento en el que vendió la empresa «no estaba en situación de libertad». «Estaba amenazada a partir de la muerte de mi marido», aseguró.

«No estaba en una prisión, pero eso no significa que estaba en situación de libertad. Estaba amenazada a partir de la muerte de mi marido, y cuando llegué a mi país el 16 de septiembre de 1976 me encontré con diarias visitas de personas sumamente importantes que decían que debíamos vender todos nuestros bienes y que no teníamos ninguna posibilidad de elección», explicó Papaleo de Graiver, durante una entrevista en el programa «Bajada de Línea» que se emite por canal 9, conducido por Víctor Hugo Morales,

Y aseguró que el acoso estaba «acompañado todos los días» de publicaciones en medios gráficos «que nos hostigaban, tratándonos de ladrones, estafadores».

Luego, la viuda del ex dueño Papel Prensa declaró: «Yo firmé documentación que nunca leí de la venta». Por la empresa, Papaleo afirmó haber recibido una seña por el 0,75 por ciento del valor de la compañía, lo que significó 7.200 dólares, mientras que dijo que «el precio que habían puesto es de 960 mil dólares, que se depositaron en una escribanía y nosotros nunca lo vimos».

Consultada sobre lo ocurrido el día en que se firmó la venta de la empresa, Papaleo de Graiver detalló que se encontraba acompañada de sus suegros y su cuñado. «Se me presentó un señor, que era Héctor Magnetto, y me dijo que tenía que firmar o íbamos a perder la vida mi hija y yo», recordó. Y afirmó: «Yo no dudé que era cierto en ningún momento, porque ese hombre tuvo la mirada que me marcó definitivamente el dolor en mi vida, la pérdida, la amputación de seis años de mi vida. Ese hombre tenía toda la violencia del poder, de decirme usted es nadie para nosotros».

Por otra parte, Papaleo de Graiver afirmó que hasta el momento no declaró la verdad sobre lo ocurrido con la empresa por consejo de abogados y especialistas: «Tenemos la posibilidad de hablar porque estábamos callados esperando el momento». «Toda vez que se trató de decir la verdad no tuvimos la menor oportunidad, porque hay un poder para que esto no suceda, no se quiere decir la verdad», aseguró.

Y destacó que su interés para con Papel Prensa es que la Argentina «tenga una empresa por la que todo aquel medio de expresión que necesita papel lo pueda usar». «Que puedan tener la posibilidad de escribir todos aquellos que quieran escribir, que puedan pagar el papel igual que los pagan todos», afirmó.

«La esperanza mía es ver funcionar a Papel Prensa no como una organización perversa sino como una empresa para la Argentina», concluyó.