Como contrapartida a la situación actual en 2023 hubo un consumo récord: la salida de molino hacia el mercado interno fue de 285.430.373 kilos (casi diez millones de kilos más que en 2022).
En abril fueron al mercado interno 18.560.486 kilos, 1,25 por ciento menos que en marzo y 21,28 por ciento menos que en el mismo mes del año pasado. El acumulado da 79.043.883 kilos, con una baja del 12,33 por ciento en relación con los primeros cuatro meses de 2023, cuando el consumo había superado los 90 millones de kilos.
La caída del consumo como consecuencia de la recesión y la inflación descontrolada de los últimos meses, es una mala noticia no sólo para las industrias, sino también para el sector productivo, que ve cómo los precios de la materia prima están constantemente a la baja y con pagos a plazos como otro síntoma de la desregulación del mercado, impuesta por el DNU del presidente Javier Milei.
En cambio, las exportaciones mantienen un ritmo positivo. En abril se exportaron 3.515.968 kilos, el segundo valor más alto del año después de enero. En lo que va del año se exportaron 13.890.850 kilos, con un crecimiento del 8,04 por ciento. (Con información de Economis)