Franco Bacigalupi, hermano de uno de los fallecidos, declaró durante más de cuatro horas en el Juzgado de Instrucción 1 en el marco de la investigación por la muerte de siete deportistas en la edición 2010 de la competencia de natación denominada «Cruce del río Paraná».
Bacigalupi realizó sus aportes en calidad de testigo y a pedido de la fiscal Amalia Spinnato. En su declaración, dijo que no estaba en el río cuando los deportistas fueron arrastrados por el agua hacia la parte inferior de las barcazas que se hallaban amarradas en aguas jurisdiccionales paraguayas, muy cerca del canal de navegación.
Bacigalupi centró su declaración en la forma en que se desarrolló el operativo de rescate, las dificultades que debieron enfrentar en el río para poder hallar los cuerpos. Además, en un primer momento habría tenido un fuerte cruce con la fiscal, aunque luego admitió que las críticas que había vertido sobre la labor de Spinnato eran equivocadas.
El expediente, que ya acumula cuatro cuerpos -equivale a 800 fojas- se encuentra en el Juzgado de Instrucción 1 a la espera de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación resuelva si debe investigar la justicia provincial o la federal, como sostiene Spinnato.
En su declaración, Bacigalupi habló de una cadena de responsabilidades que arranca en la organización y finaliza con el deficiente operativo de seguridad y control por parte de la Prefectura Naval.
El testigo llevó al Juzgado una notebook donde mostró decenas de videos y cientos de fotografías, además de croquis caseros que buscan demostrar que las barcazas que se hallaban en el canal de navegación. Además, dijo que Hugo «Tyson» Alfonso, uno de los organizadores, es quien debe dar explicaciones sobre el motivo por el cual se autorizó la competencia con un clima no del todo apto.
Con respecto a la labor de la Marina de Paraguay, dijo que los uniformados hicieron lo posible por salvar a los competidores con los pocos medios que tenían en ese momento.
Este viernes, en el Juzgado de Instrucción 1 debería ingresar una copia certificada de la investigación que en su momento realizó el fiscal de Encarnación Héctor Garay, quien desistió de continuar adelante con la causa al enterarse que en Posadas se había abierto un expediente judicial por el mismo hecho.