Si en la provincia, el Gobernador se mueve físicamente lo justo y necesario y te cuenta decisiones desde sus redes sociales, si te muestra cómo se reúne con videoconferencia con su gabinete, con cámaras y con su equipo, si por streaming se realiza el acto por Malvinas y lo ve toda la Provincia. Si, en Argentina si querés, el Presidente se queda hasta tarde leyendo lo que le escriben en sus redes y contesta cortando inmensamente distancias y se reúne con equipos de todas las provincias sin moverse, ya tenemos que dejar de resistirnos a la idea de que, aunque no andemos en un DeLorean, o no nos ayude Robotina, el futuro está aquí, nuestro futuro, porque es adonde estamos yendo.
Mariela Araceli Miravet, autora
Entonces, cómo no hacerlo quienes tenemos la posibilidad y menos obligaciones que estos señores, trabajar en casa.
Lo que abre un inmenso e incierto horizonte de cómo seguir cuando volvamos a salir a las calles, porque si lo pensamos un poquito más, cada cosa a la que nos obliga esta pandemia sólo apura lo que en algún momento deberíamos resolver.
La Plataforma Guacurarí fue sin duda una decisión que estaba esperando su momento de brillar, que ya funcionaba, pero que fue puesta a prueba con alumnos de toda la provincia, de todas las edades y sus docentes. Algunos colegios pusieron a disposición una plataforma propia, pero no en todos los casos funciona tan bien, y los reclamos se hicieron más fuertes al momento de publicar los montos de las cuotas de este mes sin clases presenciales, y en algunos casos, con muchas fotocopias y sin contacto con los docentes. Claro que esto nos tomó por sorpresa, y hay que ver cuanto más nos quedamos en casa, pero a un mes, y cuando hablamos de dinero estas cosas son de discusión.
Los jardines de infantes se manejaron con actividades a través de grupos de whatsapp, face, y reuniones con videoconferencia. Pasando desde trabajitos, canciones, saludos de las maes y hasta consejos para cuidar la cabeza en cuarentena.
Las facus y universidades freezaron todos los inicios, mientras que las que ya estaban duchas le metieron clases virtuales, pero recién por estos días.
La coordinación a la que se llegó en actividades esenciales como la compra del súper, la vacunación, la donación de sangre y los pedidos de turnos.
La medicina ha encontrado la manera de poder abarcar la atención y primero la consulta de más pacientes, en menos tiempo, debido a la situación y a la tecnología implementada en la salud, con líneas de consulta, con la apertura de diferentes canales, como la video consulta.
Más allá de consultas respecto al COVI19, algunas especialidades médicas siguen la atención coordinada de sus pacientes y hasta las obras sociales siguen ofreciendo atención por ejemplo de videoconsulta en tratamiento psicológicos.
Tengo amigos profesionales que a través de plataformas brindan su conocimiento gratis y responsablemente, porque todos tenemos para aportar en esta situación.
El Gym que me puso en marcha, cerró desde el primer momento para cuidar a sus clientes y al resto, pero WIFIT nos sigue entrenando, como siempre, Laura y Bicho nos entrenan personalizados así que no nos dejarán salir rodando de esta (confieso que era uno de mis temores). Quiere decir que le buscan la vuelta.
Quienes tuvieron que cerrar sus negocios, en muchos casos siguen trabajando por internet con venta, y hasta incursionando en nuevas actividades.
Los sitios de comida que le dieron una vuelta para seguir trabajando con todas las medidas de prevención.
Los súper tuvieron que proponer alternativas a sus clientes.
Y también las diferentes vías de comunicación y la tecnología que utiliza la gente es poderosa a la hora de denunciar, denunciar precios abusivos ante la ley, y denunciar también a quienes nos arriesgan a todos y no cumplen con las cuarentenas indicadas.
No es fácil, pero la tecnología nos sacó mucho, nos distrajo, nos facilitó y nos hizo olvidar del esfuerzo en muchos casos, y hasta le restó valor a algunos gestos.
Tengo amigos, amigas, familia que a través de un mensajito en cualquier plataforma a llegado a activar cadenas de cosas buenas, para ayudarnos entre nosotros, para llegar a quien no podemos y hasta para acompañar a quien esté sol@, solit@. Mariela Araceli Miravet
