Atento a lo expresado en un matutino gráfico local sobre la actitud adoptada por un interno de intentar hacer un boquete en la pared para posibilitar una fuga masiva de la Unidad Penal II de Oberá, el Servicio Penitenciario Provincial aclara:
a.- Que en vísperas del día 4 de febrero del corriente año en una de las dos recorridas diarias y de rutina que realiza el personal penitenciario por las distintas celdas donde se encuentran alojados los internos, se pudo comprobar que una de las paredes de las celda donde se encontraba alojado Mauro Gabriel Meza (24) estaba dañada, habiéndose notado restos de revoque en el piso, lo que llamó poderosamente la atención de los agentes de la fuerza quienes inmediatamente realizaron una acabada inspección ocular del lugar y una exhaustiva requisa entre las pertenencias del interno, habiéndosele encontrado dos elemento corto-punzantes -de fabricación casera- que le había permitido dañar parte de la mampostería de dicha celda, lo que motivó que el personal de turno elevara dichas novedades a las autoridades del S.P.P. quienes inmediatamente elevaron los informes correspondientes al Tribunal Penal Nro. 1 de la 2da Circunscripción Judicial para que determine el traslado de Meza, por razones de seguridad, a la Unidad Penal I de Loreto medida que fue efectiva el día 4 de febrero por disposición del propio Juez que entiende en la Causa.
b.- Que en ningún momento estuvo en riesgo la seguridad del Penal II de Oberá, como tampoco del personal penitenciario y mucho menos de los internos, dado que el interno Mauro Meza se encontraba alojado en una celda individual.
c.- En virtud de lo expuesto, queda claro que – al momento de los hechos narrados – Mauro Meza no tenía, ni tuvo contacto alguno con otros internos, lo que se descarta cualquier posibilidad de una fuga masiva de internos de dicha sede penitenciaria