Berlusconi condenado a siete años de prisión por el caso «Ruby»

El ex primer ministro italiano fue condenado por prostitución de menores y abuso de poder. Recibió también una prohibición vitalicia para ejercer cargos públicos. La acusación considera probada la «prostitución sistemática» en los encuentros «bunga bunga» que Berlusconi convocaba en su residencia campestre de Villa Arcore, cerca de Milán, y que la defensa presentó como meras fiestas galantes.

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En su primera respuesta al fallo, el empresario mediático y líder del conservador partido Pueblo de la Libertad (PDL) lo denunció como un intento de eliminarlo de la vida política.

En un comunicado recogido por la agencia EFE, calificó de «violenta» la condena dictada por el tribunal de Milán, la definió como una «ofensa» a los italianos que lo han votado, y aseguró que tiene intención de «resistir a esta persecución» judicial porque es «inocente».

Las tres juezas de la Sección Cuarta en lo Penal de los tribunales de Milán, presidida por Giulia Turri, hallaron culpable a Berlusconi de los delitos de prostitución de menores y posterior abuso de poder para intentar encubrirlo, y le dictaron siete años de cárcel, uno más de los requeridos por la fiscalía.

La sentencia es la segunda que condena a Berlusconi en pocas semanas, ya que en mayo fue condenado por evasión fiscal El tribunal consideró probado que el 14 de febrero y el 2 de mayo de 2010, cuando Berlusconi, de 76 años, mantuvo relaciones sexuales con «Ruby» (la bailarina marroquí Karima el Mahroug, entonces de 17 años), era consciente de que ella era menor de edad, informó la agencia DPA.

La sentencia es la segunda que condena a Berlusconi en pocas semanas. En mayo fue condenado por evasión fiscal en un caso contra su consorcio de medios Mediaset, recuerda Europa Press.

El fallo del lunes se tomó tras siete horas de deliberaciones, y toma en cuenta que está demostrado que «Ruby» tomó dinero de Berlusconi. Ambos negaron siempre que haya sido a cambio de servicios sexuales. La defensa exculpa así al multimillonario que todavía hoy tiene gran influencia sobre el gobierno italiano.

El fallo incluye la figura de abuso de poder porque Berlusconi,  durante la noche del 27 al 28 de mayo de 2010 y siendo aún primer ministro, solicitó la excarcelación de «Ruby», detenida por robo por la policía de Milán, afirmando que se trataba de una sobrina del entonces presidente egipcio, Hosni Mubarak.

La prisión y la inhabilitación vitalicia para ejercer cargos públicos solo serán efectivas después que Berlusconi haya ejercido todas las instancias jurídicas posibles, como los recursos de apelación y la Corte de Casación, detalló la agencia ANSA.

La carrera política de Silvio Berlusconi, que ya lleva veinte años, queda ahora en suspenso.

Aunque el ex premier italiano no tiene cargos oficiales en el actual gobierno, una inestable coalición que intenta mantener el rumbo neoliberal contra viento y marea tras las peleadas elecciones de febrero, de fuerte tono «antisistema», sí influye decisivamente sobre uno de los partidos que la componen.

El abogado de Berlusconi, Niccolo Ghedini, anunció en declaraciones emitidas a la salida del tribunal y recogidas por CNN y otros medios que apelaría de inmediato la sentencia, a la que calificó de «tan esperable como injusta».

«Estoy tranquilo», agregó Ghedini, «porque hace años que vengo diciendo que este juicio no debió haber tenido lugar en este tribunal».

Mientras que la defensa de Berlusconi afirma que las fiestas «bunga bunga» eran elegantes veladas nocturnas, la fiscalía las definió como reuniones de índole sexual donde a las mujeres se les pagaba la asistencia.

«Ruby» y Berlusconi no declararon en este juicio. La bailarina no se presentó, pese a haber sido convocada dos veces por la defensa, que prefirió finalmente eliminarla de su lista de testigos.

El Mahroug sí testificó en otro juicio, el que se le sigue a colaboradores de Berlusconi por conseguirle prostitutas. En esa declaración, «Ruby» afirmó haber participado de media docena de fiestas en la quinta de Berlusconi, quien le entregó sobres con hasta 3000 euros al término de cada una.

La bailarina agregó que un intermediario de Berlusconi le acercó más tarde un sobre con 30.000 euros que, dijo, el político conservador italiano le entregaba para que abriese un salón de belleza.

La defensa de Berlusconi afirma que «Ruby» se hacía pasar por una joven de 24 años cuando tuvo los encuentros de que se acusa a Berlusconi, pese a tener 17. También alega que era ella quien afirmaba ser sobrina de Hosni Mubarak.

Próxima a la aldea de San Martino, en la comuna de Arcore (provincia de Monza), la mansión de Berlusconi es un antiguo monasterio benedictino del siglo XVI. Situada a orillas del Lambro, fue adquirido por la familia condal Giulini, que la reestructuró en el siglo XVIII con estilo neoclásico.