Argentina / Economía | Sube la nafta y crece el riesgo de cierres por el ajuste anarcocapitalista

Las políticas liberales del ultraderechistas presidente Javier Milei golpean de lleno a un sector clave de la economía argentina: mientras el precio de la nafta no para de subir, las estaciones de servicio, en su mayoría PyMES, se encuentran al borde del colapso. La Federación de Entidades de Combustibles ha enviado una contundente nota al ministro de Economía, Luis Caputo, advirtiendo sobre la crítica situación y el creciente riesgo de cierres debido a la baja rentabilidad y el impacto desigual del "sinceramiento de precios" impulsado por el Gobierno. No hay un peso en los bolsillos, esa es la realidad.

El documento, firmado por el presidente de la Federación, Juan Carlos Basílico, no deja lugar a dudas: aunque reconocen la necesidad de corregir distorsiones en el mercado, el ajuste ha recaído de forma desproporcionada sobre los operadores minoristas. Esto ha generado una caída abrupta en los volúmenes de despacho y ha expuesto la vulnerabilidad de las estaciones más pequeñas, que operan con estructuras de costos rígidas y márgenes ya de por sí estrechos.

El «sinceramiento» que asfixia a las PyMES

La Federación subraya que el proceso de corrección de precios, que en teoría buscaba equilibrar el mercado, ha provocado efectos colaterales perjudiciales para quienes están en el último eslabón de la cadena. «Coincidimos con la necesidad de corregir las distorsiones que por años afectaron al mercado, pero no podemos ignorar que el ajuste ha recaído en buena medida sobre los operadores más débiles del sistema», reza el texto.

En este contexto, la entidad reclama al ministro Caputo medidas concretas para garantizar una mayor equidad en la distribución del ingreso dentro del negocio de los combustibles. Esto incluye la revisión de los contratos entre las estaciones de servicio y las empresas refinadoras, buscando una participación más justa en la rentabilidad, especialmente cuando otros eslabones de la cadena ya están viendo beneficios tras la estabilización monetaria y el aumento de los precios.

La mirada se posa también sobre YPF, la empresa de mayoría estatal, a la que consideran clave para liderar un nuevo esquema comercial más equilibrado. La Federación confía en que una decisión positiva de YPF en favor de sus operadores de bandera actuaría como un «catalizador» para que el resto de las empresas refinadoras imiten esas condiciones, generando un «efecto de derrame virtuoso» que permita preservar la continuidad operativa de los operadores más vulnerables.

La viabilidad de un sector que emplea a más de 60.000 personas en todo el país está hoy fuertemente amenazada. La situación es un claro reflejo de cómo las políticas de ajuste del gobierno ultraderechista de Javier Milei, lejos de generar un crecimiento equitativo, están asfixiando a las PyMES y profundizando la crisis en todos los sectores empresariales de la Argentina. La Federación espera una respuesta oficial y un canal de diálogo que permita definir una hoja de ruta común antes de que la situación sea irreversible.