El titular del SADRA, Guillermo Marconi, denunció que el árbitro Néstor Pitana, afiliado a su sindicato, «es víctima de lobby para que no vaya al mundial de Brasil pese a ser el más capacitado, porque está todo arreglado para que vaya Diego Abal, que ignora el reglamento».
«Pitana es víctima de un lobby que encabeza Jorge Romo (ex titular del Colegio de Arbitros), quien empuja desde afuera para que Abal, que no tiene aptitudes técnicas ni físicas, vaya al mundial», remarcó Marconi en una entrevista con el programa radial Deportivo Télam.
«Romo todavía conserva su influencia y por cómo se maneja todo, estoy seguro de que Abal, que no es representativo del arbitraje argentino, estará el año que viene en Brasil», advirtió.
Al hacer foco en Abal, el también abogado y panelista de programas deportivos lo acusó de «desconocer el reglamento, algo que se puso de manifiesto en aquel partido entre San Lorenzo y Colón en que dio por válido un gol de Ariel Garcé (1-1), de los santafesinos, tras una acción totalmente viciada de nulidad».
«Si Abal repitiera algo así en un mundial, todos los argentinos quedaríamos como el traste. Sin embargo acá lo bombean a Pitana e impiden que el arbitraje argentino tenga un representante del Interior en el máximo escenario del fútbol», siguió cuestionando Marconi.
«El tercer candidato es Patricio Loustau, que también está allí por portación de apellido (NdR: su padre, Juan Carlos, está en la comisión de designaciones de jueces de la Conmebol), y si bien es mejor que Abal, es inferior, por ejemplo, a Germán Delfino», puntualizó.
Al tomar como ejemplo a Delfino, el ex Secretario de Trabajo de la Nación durante la década del 90 lo encuadró como «el mejor de los que están en la Asociación Argentina de Arbitros».
«Si hoy uno hiciera un ranking de árbitros habría que decir que Pablo Lunati es el más confiable y después lo sigue Sergio Pezzotta. Ellos dos son de la camada anterior y ya dejaron de ser internacionales, pero aportan equilibrio respecto de otros más nuevos como Delfino y el misionero Pitana», precisó.
«Por eso sostengo que las designaciones deben realizarse por sorteo, ya que todos los árbitros de Primera tienen que estar capacitados para dirigir cualquier partido. Y si alguno no lo está, debe irse», resaltó.
Finalmente Marconi vaticinó que la incorporación del presidente de Argentinos Juniors y vice de AFA, Luis Segura, a la conducción del Colegio de Arbitros, «anuncia lo que se vendrá: una etapa de cambios».
«A ese organismo se sumó también Alejandro Toia (ex árbitro), para ocupar un cargo que antes me habían ofrecido a mí, pero no lo acepté porque las cosas en el Colegio no están bien», argumentó.
«Hoy existe una total honestidad en el arbitraje argentino y a eso contribuye mucho también que existe una renovación total de la dirigencia», concluyó Marconi, quien está consumiendo sus últimos días de vacaciones en Mar del Plata.